Consumada disertante, columnista, frecuente figura invitada en programas de televisión, defensora de la familia y fundadora del Fondo Comunitario "Modales del Corazón", de los Estados Unidos, una organización sin fines de lucro que aboga por una vuelta a la civilidad y el respeto en nuestra sociedad. Ya sea aconsejando a los padres sobre cómo educar hijos responsables, alentando la educación del corazón o entrenando ejecutivos para que desarrollen habilidades efectivas de comunicación, la definición de "buenos modales", según Jill, es siempre la misma: una actitud del corazón que consiste en darse a los demás sin esperar nada para sí. Ella es también una orgullosa madre de dos gemelos que son prueba viviente de su contagiosa pasión por aquello a que ha dedicado su vida: lograr modificar actuales modelos de educación para volver a instaurar uno que inspire el respeto por uno mismo y los demás, la cortesía, la responsabilidad ante la sociedad y, desde luego, las "buenas maneras del corazón".